El Cardenal del Perú, Juan Luis Cipriani, rechazó a los promotores de interceptaciones telefónicas en el país y que esconden diversos intereses, por ello remarcó que tales actos constituyen una violación de derechos fundamentales.
El Cardenal del Perú, Juan Luis Cipriani, rechazó a los promotores de interceptaciones telefónicas en el país y que esconden diversos intereses, por ello remarcó que tales actos constituyen una violación de derechos fundamentales.
El primado de la Iglesia Católica emitió este pronunciamiento en su programa radial "Diálogo de Fe" y en momentos en que en el país aparecen diversos audios de chuponeo telefónico, así como hackeo de mails y otros actos, como el caso de la empresa Discover Petroleum que involucró al ex ministro aprista Rómulo León y al abogado Alberto Quimper.
Cipriani destacó la importancia del respeto a los derechos humanos que en estos días se han visto maltratados por sistemas que interfieren las llamadas por teléfono y correos electrónicos.
“Evidentemente (el chuponeo) es un ataque fuerte a uno de los más importantes derechos humanos: el derecho a la honra, a la intimidad, el derecho a la vida personal, porque así se genera una falta de confianza en el país”, manifestó.
Respecto a las autoridades políticas, el Pastor de Lima, destacó “el que es nombrado para un cargo político es para servir. Ese grupo pequeño tiene la obligación de cuidarnos y si no lo hace, se genera un fastidio, un pesimismo (en la población). Mi propuesta de hoy es que todos tratemos de dar buen ejemplo”, puntualizó.
Por ello, insistió en que la propuesta del “buen ejemplo tiene que ser la inclinación mayoritaria en un país. El país lo cambiaremos uno a uno. Nuestra ciudad es una casa común, los hombres y mujeres somos sujetos de moral, nuestra conducta puede ser buena o mala. Desde el que vende periódicos hasta el último. Todos tenemos la oportunidad de una conducta honesta”, exhortó.
“El buen ejemplo nos obliga a todos, desde el que manda en el país hasta el último ciudadano, a cumplir su deber lo mejor posible. El país está reclamando el concurso del buen ejemplo, y ese buen ejemplo choca cuando personas que tienen más responsabilidad están comprometidas en enormes coimas, un muy mal ejemplo de gente que tiene más educación; y, por lo tanto, mayor obligación. Ese mal ejemplo desanima a otros”, indicó.
Cipriani también lamentó la actual situación de crisis económica que se vive en el mundo, a la que calificó como “un enfermo que tenemos que recuperar”, destacando que es tiempo para pensar en nuestra responsabilidad moral.
“La situación económica ha sido un mal ejemplo de personas de gran responsabilidad en Estados Unidos, Europa y Asia. Sabían que estaban prestando sin garantías. Y de esa manera ha explotado todo el sistema económico. Esto no tiene que ver con el capitalismo, tiene que ver con la moral. No es un problema solamente de resolver una economía, sino también de diagnóstico, y la moral que nace de dentro de la persona”, señaló.
Ante la situación de crisis económica global y las huelgas en el Perú, el Arzobispo de Lima invocó a la paz social. “Las dificultades que estamos viviendo, no deben ser motivo, ni excusa para la toma de carreteras, arrojar piedras, causar incendios, eso es ideología. La violencia nunca es camino para nada, porque engendra más violencia”.
“No vayamos por el camino de la violencia, del mal ejemplo, tenemos que aprender a dialogar con más sinceridad, a tener un poquito más de paciencia, creo que todo eso se logrará si estamos más cerca de Dios. Sin oración me parece que es muy difícil aguantar las dificultades”, exhortó.
